(Ampl) Los Veintiocho no ven "realista" concluir las negociaciones el TTIP bajo la administración Obama

EUROPA PRESS 23/09/2016 17:17

Los ministros de Comercio de los Veintiocho han constatado este viernes que no es "realista" poder concluir este año las negociaciones con Estados Unidos sobre el acuerdo de libre comercio, conocido como TTIP, y han acordado que abordarán de nuevo los avances en las conversaciones en noviembre, basándose en las conclusiones que pacten los líderes europeos en la próxima cumbre de finales de octubre.

"Los ministros abordaron el estado de las negociaciones (del TTIP). La conclusión de las negociaciones este año no es realista. No es realista tener una acuerdo final antes de que finalice la Administración Obama", ha expresado en rueda de prensa el ministro de Comercio de Eslovaquia, Peter Ziga, tras la reunión informal en Bratislava.

Ziga ha defendido que cualquier acuerdo, incluyendo el TTIP, debe ser equilibrado y "beneficioso para la UE", por lo que el contenido es "más importante" que la velocidad. Además, el ministro eslovaco ha señalado que los responsables de Comercio de los Veintiocho debatirán de nuevo el futuro de este acuerdo comercial en su próxima reunión de noviembre y después de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de octubre, donde los líderes europeos abordarán el tema.

Por su parte, la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, ha reivindicado en la misma rueda de prensa que "tiene sentido" seguir negociando con los Estados Unidos, y ha destacado que los equipos negociadores intentarán avanzar lo máximo posible en la próxima ronda, que tendrá lugar la primera semana de octubre en Nueva York.

No obstante, la comisaria sueca ha reconocido que, después de las elecciones en Estados Unidos, habrá una "pausa natural" en las conversaciones entre la UE y Washington. "La administración Obama estará hasta el 19 de enero. Los contactos a nivel técnico y político pueden tener lugar hasta el 19 de enero. Si no fuéramos capaces de logar un acuerdo antes del 19 enero , habrá una pausa natural", ha explicado Malmström, que sin embargo no ha querido predecir cuándo se retomarían las conversaciones.

Asimismo, la comisaria ha señalado que corresponde a los Estados miembros decidir si es necesario establecer un nuevo mandato negociador para retomar las conversaciones con el nuevo Gobierno de Estados Unidos.

BRUSELAS ACLARARÁ CUESTIONES "CONTROVERTIDAS" DEL CETA

En cuanto a los pasos a seguir para firmar el acuerdo comercial alcanzado con Canadá, los ministros de Comercio han instado al Ejecutivo comunitario a elaborar una declaración que explique y aclare las cuestiones más "controvertidas" del acuerdo, de forma que el tratado pueda ser firmado por ambas partes en la cumbre UE-Canadá del 27 de octubre.

"Hay áreas percibidas como muy sensibles. Hemos acordado que la Comisión prepare una declaración conjunta que explique las cuestiones controvertidas, como la protección de inversiones, los servicios públicos o los estándares medioambientales", ha apuntado en comparecencia de prensa el ministro eslovaco.

La comisaria Malmström ha indicado que Bruselas está trabajando con las autoridades canadienses y con la presidencia eslovaca para tratar las reservas que existen mediante una declaración "interpretativa" que tendrá valor legal y podrá ser adjuntada al texto final del acuerdo comercial.

En este sentido, Ziga ha destacado que es bastante "probable" que se convoque un consejo extraordinario de comercio el próximo 18 de octubre para que los ministros del ramo puedan dar su visto bueno tanto al acuerdo como a la declaración. Posteriormente, el tratado comercial será firmado en la cumbre bilateral del 27 de octubre y se remitirá al Parlamento Europeo para que se pronuncie.

Una vez reciba la 'luz verde' por parte de la Eurocámara, el CETA podrá comenzar a aplicarse de forma provisional, y entonces podrá ser ratificado por los parlamentos nacionales. En cualquier caso, Malmström ha defendido que se trata de un tratado que aporta beneficios económicos "inmediatos" y que abre el mercado de la contratación pública y la cooperación en relación a estándares laborales y medioambientales.