Grecia, uno de los países más afectados por la crisis económica global, ha pensado en una solución que lleve dinero a las arcas públicas.
El ministro de protección y finanzas de este país ha decidido poner la policía y sus infraestructuras en alquiler al mejor postor.
Un agente experimentado para guardaespaldas o escolta de algún famoso adinerado cuesta 30 euros la hora.
El Gobierno griego ha puesto en el mercado del alquiler no solo a todos sus agentes de la policía, sino también los coches, lanchas patrulleras, helicópteros y otros, según publicó el periódico ' Protothema'.
Los patrulleros podrán alquilarse para películas o para los ciudadanos pudientes que necesiten seguridad personal extra por una tarifa de 200 euros la hora, mientras que los helicópteros tendrán un coste algo más elevado, de 1.500 euros la hora.
Sin embargo, el gobierno asegura que hay margen para la negociación de los precios.
De acuerdo con las fuentes oficiales, el ministro solo aprobará el alquiler siempre que este no interfiera en las operaciones habituales de la policía. ¿Pero cómo se garantizará esto?
La decisión del Gobierno griego asegura que cualquier ciudadano con dinero suficiente para pemitirselo podrá alquilarse un policía.
Sin embargo, el actual ministro de Protección al ciudadano, Michalis Chrisochoidis, explicó que esta nueva regulación había sido aprobada por su predecesor, Papoutsis y él no estaba de acuerdo.
La deuda pública griega supera los 458 000 millones de euros y el país atraviesa la peor recesión de su historia.