En concreto, y en una primera fase del acuerdo, el BMZ apoyará a UpM a través de un proyecto de consultoría por un valor de 2 millones de euros hasta 2019. Este apoyo irá destinado fundamentalmente a abordar la baja integración de las mujeres en el mercado laboral y a la elevada tasa de desempleo entre jóvenes.
Asimismo, se destinará a mejorar la integración regional y el comercio en el seno de la región, donde se busca crear unas condiciones favorables para un mayor crecimiento económico y prosperidad, así como mejorar las perspectivas a largo plazo para los habitantes de la región.
"Debemos conceder una mayor prioridad a contemplar el Mediterráneo como un área de cooperación. Si queremos generar unas condiciones que favorezcan la seguridad y el desarrollo, es necesario reforzar la cooperación entre Europa y África", Silberhorn.
Por su lado, Al-Omoush, indicó que este acuerdo representa "una contribución sustancial y específica a las actividades e iniciativas regionales globales de la UpM para avanzar en los tres objetivos estratégicos de desarrollo humano, estabilidad e integración".