Desarticulado en el País Vasco un sanguinario comando de ETA

Noticias Cuatro 01/03/2011 08:47

Los cuatro, según fuentes de la Guardia Civil, formaban parte de un comando "legal", no fichado por la policía, y se les acusa de participar, en el asesinato de Puelles, la última víctima mortal de ETA en el País Vasco. Además, también se cree que participaron en atentados en Burgos y Cantabria, ocurridos en la misma época; el atentado más grave destrozó la casa cuartel de Burgos con una furgoneta bomba, causando 65 heridos, el 29 de julio del mismo año, cuarenta días después del asesinato de Puelles. Ese año en Cantabria, en mayo, explosionó un artefacto contra un repetidor en el pueblo de Guriezo.

Un historiasl sanguinario

La Guardia Civil también maneja la hipótesis de que estos miembros de ETA podrían estar relacionados con otros tres atentados con bomba en Bilbao todavía no esclarecidos y que se cometieron a pocos kilómetros de donde fue asesinado Puelles. Estos atentados fueron sendas bombas contra el escolta Gabriel Ginés -herido grave, se salvó- y contra una sede socialista, ambos cometidos en el barrio bilbaíno de La Peña (junto a Arrigorriaga) en octubre de 2007 y abril de 2008, respectivamente, y la bomba-lapa colocada en el coche de un agente de la Policía del barrio de Zorroza en septiembre de 2008, que no explosionó.

Puelles, muerto el 19 de junio del 2009 con una bomba-lapa adosada a su vehículo en Arrigorriaga (Vizcaya), fue la primera y única víctima mortal de la banda terrorista en Euskadi desde que el socialista Patxi López se convirtió en Lehendakari hace dos años.