Pimentel dispone de todo el mes de febrero para elaborar una propuesta que será de obligado cumplimiento tanto para AENA como para el colectivo de controladores. Su trabajo no va a ser fácil aunque cuenta con el asesoramiento de dos abogados que representarán a las partes. Los representantes han estado negociando desde el 15 de enero con encuentros diarios y aunque han alcanzo acuerdos en bastantes puntos, aún quedan aspectos en los que hay un mayor distanciamiento: jornada laboral y salarios.
Conflicto por el convenio colectivo
El conflicto entre Aena y los controladores se prolonga ya desde hace varios meses por las diferencias a la hora de renovar el anterior convenio colectivo del sector, que data de 1999, aunque finalizó su vigencia en 2004.
En agosto, los representantes ambas partes firmaron un preacuerdo que quedó roto en noviembre, en medio de acusaciones de incumplimiento mutuas. Este hecho provocó que los controladores dejaran de acudir de manera masiva a sus puestos de trabajo en un gran número de aeropuertos españoles durante el pasado puente de la Constitución, lo que motivó el cierre del espacio aéreo español por espacio de 20 horas y la declaración del estado de alarma por parte del Gobierno el 4 de diciembre, que se prorrogó hasta el 15 de enero.