"La pornografía tiene efectos corrosivos en el alma del hombre y en su habilidad para funcionar como marido y, como extensión, como padre", señaló la estrella televisiva citando, además, el caso del político Anthony Weiner, envuelto en un escándalo de sexting (envío de correos y mensajes de contenido erótico y/ pornográfico).
"En palabras sencillas, debemos educarnos y educar a nuestros niños para entender que el porno es para perdedores; una salida aburrida, ineficiente y que no lleva a ninguna parte, para gente demasiado vaga como para cosechar las grandes recompensas de una sexualidad sana", añadía la canadiense.
"Esto es un peligro público sin precedentes dada la libre disposición, el acceso de forma anónima y la fácil difusión de la que goza hoy en día. ¿Cuántas familias van a sufrir? ¿Cuántos matrimonios se romperán? ¿Cuántos hombres talentosos van a tirar por la borda sus relaciones y sus carreras por una breve emoción masturbadora?", se pregunta la estrella de 49 años.