Livermore dimite como intendente del Palau de Les Arts por "trabas administrativas" que impiden llevar a cabo su labor

EUROPA PRESS 05/12/2017 17:46

El director de escena se ha contestado a sí mismo al apuntar que cree que la situación que atraviesa el teatro de ópera valenciano es "consecuencia inconsciente de una falta de conocimiento" de cómo ha de funcionar una entidad de estas características.

Livermore ha comparecido este martes en una rueda de prensa --que ha convocado y pagado él mismo, según ha remarcado, incluso con factura-- en la que ha desvelado sus razones para abandonar el cargo que ocupa desde enero de 2015, cuando sustituyó a Helga Schmidt. Se da la circunstancia de que el Juzgado de Instrucción número 15 de Valencia acaba de abrir juicio oral contra Schmidt y otras cuatro personas más por presuntos delitos de prevaricación, malversación y falsedad.

A la comparecencia de Livermore ante los periodistas han asistido, además, el tenor y director Plácido Domingo --que inaugurará el sábado que viene la temporada con 'Don Carlo'--; Fabio Biondi, uno de los directores musicales del coliseo, y el director económico, Francisco Potenciano, así como decenas de trabajadores de diversos departamentos. Livermore ha sido recibido y despedido al término de su intervención con aplausos.

El artista turinés ha aclarado que no se marcha por presiones en su gestión, que siempre ha ejercido "libremente" tanto con el actual gobierno de la Generalitat como con el anterior, ni por cuestiones presupuestarias, sino por razones de tipo administrativo que provocan una situación de la que no quiere ser "cómplice".

El "detonante", según ha revelado, es que, de acuerdo al borrador del Informe de auditoría de cumplimiento de la Intervención General de 2016 que llegó hace poco a su despacho ni él mismo ni su equipo directivo estarían cumpliendo con la normativa del sector público empresarial de la Generalitat que establece que para las contrataciones hay que convocar procesos público y de acuerdo a los principios de mérito y capacidad. Es decir, ha ironizado, que "ni yo mismo ni el personal" de la casa está capacitado para elegir a Plácido Domingo o Gregory Kunde como estrellas de sus espectáculos.

CONSELLERIA, "INCAPAZ DE ENCONTRAR UNA SOLUCIÓN"

Además, ha recordado que ya el Informe de la Intervención de 2015 puso de manifiesto la incompatibilidad entre su cargo como responsable de Les Arts y los trabajos que realiza para otras instituciones en su faceta de director de escena y durante este tiempo la Conselleria de Cultura "ha sido incapaz de encontrar una solución". Y eso, "a pesar de su interés por mantenerme en el cargo", ha apostillado.

Aquí Livermore ha defendido que durante su etapa al frente de la institución ha demostrado que un director de escena, un artista, sí puede ejercer también como intendente y ha nombrado casos como los del propio Plácido Domingo, Emilio Sagi, Àlex Rigola y Cecilia Bartoli, entre otros, que conjugan ambas ocupaciones.

A estos obstáculos ha sumado otros factores, como que la normativa del sector público empresarial impide realizar contrataciones temporales y ajustes "necesarios" para la normal actividad de la institución. Ha puesto como ejemplo que no se ha conseguido la plaza de secretaría técnica de la Orquestra de la Comunitat Valenciana --"la mejor de España", ha subrayado-- ha quedado dos veces desierta por no poder ofrecer condiciones económicas de mercado o que no es posible completar la plantilla en puestos clave como el de concertino. "¿Hay voluntad de terminar de la mejor orquesta de este país?", ha incidido.

Davide Livermore ha señalado que no ha hablado con el conseller de Cultura, Vicent Marzà, porque el interlocutor directo es el secretario autonómico, Albert Girona, con quien ha mantenido una conversación "intensa, inteligente y clara" de la que no querido dar más detalles.

Preguntado por si alguna vez se le ha pasado por la cabeza renunciar a otros trabajos por la dirección de Les Arts ha resaltado que ha rechazado proyectos fuera por este cargo pero ha defendido negarse a la exclusividad. "Yo estoy aquí por ser un artista, no por ser un funcionario", ha sentenciado entre nuevos aplausos de los asistentes.

Livermore ha insistido en que se marcha porque cree que "van a llegar más limitaciones en esta línea" y no quiere ser "cómplice". "Mi último servicio es preguntar si Valencia y la Comunitat Valenciana quieren un teatro de ópera público al servicio de la ciudadanía", ha agregado.

El hasta ahora intendente ha alabado la labor de la plantilla de Les Arts que, en 2015, "con un teatro en andamios y con la imagen de una operación policial digna de una producción estadounidense como icono se puso manos a la obra". El resultado, ha dicho "una pretemporada única en España, jornadas de puertas abiertas, Les Arts Volants, 'sold outs' y una altísima calidad artística" y "con el menor presupuesto de la historia de Les Arts", ha reivindicado. Igualmente, ha enfatizado la "transparencia" de su gestión abriendo su despacho a los periodistas para explicar al detalle su remuneración, de 135.000 euros, ha recordado.

"COMPRENSIÓN" Y "CONOCIMIENTO MUY ESPECÍFICO"

Livermore ha invitado a hacer "una reflexión sobre el futuro de las instituciones culturales públicas" y ha considerado que necesita "comprensión" y un "conocimiento muy específico". De lo contrario, si se elimina al alta calidad de su programación, puede quedarse como "una concha muy bonita con producciones de alquiler" pero ha puesto en duda su utilidad.

Preguntado por si ha temido alguna vez acabar como Schmidt por las objeciones puestas por la Intervención, Livermore ha subrayado que "no" y ha defendido la labor artística de su predecesora aunque sin valorar "cuestiones legales" o judiciales.

Finalmente, ha dicho desconocer qué va a pasar en el futuro con los directores musicales --él va hacer efectiva hoy mismo su renuncia-- y ha expresado su confianza en que el proyecto artístico de Les Arts "pueda seguir adelante".