La empresa de la actriz tendrá que pagar 1,55 millones de dólares para paliar las demandas que ha recibido por ser deshonesta con sus clientes y asegurarles que sus productos de limpieza y jabones no contenían un producto químico que luego resultó que sí portaban.
Según la demanda, Honest Company comercializó productos libres de lauril sulfato de sodio (SLS). Aunque en realidad esa sustancia sí se encontraba realmente en su gama de productos, pero con un compuesto diferente.
La empresa está de acuerdo en pagar a los consumidores que se sienten estafados. Pueden obtener un cheque o créditos de Honest.com. La compañía también se comprometió a corregir sus errores de comercialización, y afirma que ha reformulado los productos para abordar el problema.