El canibalismo ligero del film vegetariano 'Raw' no cumple todas las expectativas en Sitges

EUROPA PRESS 12/10/2016 13:03

El público había asistido a la proyección esperando sensaciones más fuertes, especialmente tras la acogida de la cinta en el Festival de Toronto, donde provocó desmayos y ataques de ansiedad entre los asistentes y obligó a habilitar ambulancias.

En la película, Justine, una joven que entra en la escuela de veterinaria donde estudia su hermana, es una vegetariana estricta como toda su familia, pero ella comenzará a experimentar síntomas de lo más extraños después de comer carne cruda en una prueba de iniciación en la universidad.

Si al iniciar el pase muchos, cargados con enormes expectativas, preveían una carnicería cruda y enfermiza dentro de la sala, a la salida la mayoría de espectadores entonaban que no era para tanto, quizás debido a que público de este festival está más acostumbrado a la sangre que los asistentes a Toronto.

A lo largo de la cinta, que es generosa en sangre pero ligera respecto a lo esperado, el público no ha vitoreado --como es habitual en Sitges-- cada uno de los mordiscos de carne humana, lo que ha culminado en un frío aplauso final, tras el cual algunos han opinado que las ambulancias que tuvieron que asistir a algunos espectadores en Toronto eran puro marketing.

No obstante, otros han celebrado la historia de iniciación adolescente que yace tras el canibalismo de la joven, interpretada por Garance Marillier, quedando satisfechos con la dosis caníbal de los 99 minutos de película.

La joven Ducournau (1983), que forma parte de esta hornada de directoras de género que ha marcado la tendencia femenina de este festival, estudió cine en La Fémis, donde se especializó en guión y debutó con el cortometraje fantástico 'Junior'.