Ariana Grande protagoniza un enérgico concierto en el Palau Sant Jordi

EUROPA PRESS 13/06/2017 23:48

La artista norteamericana Ariana Grande ha ofrecido este martes en el Palau Sant Jordi de Barcelona un enérgico concierto de su gira 'Dangerous woman', con total normalidad retomada de su gira europea tras el atentado terrorista en el Manchester Arena (Reino Unido) el pasado 22 de mayo, que dejó 22 muertos.

Contra todo pronóstico, los accesos al recinto se han producido sin grandes esperas, pese a que sí han sido aparentemente mayores las dotaciones de personal de seguridad dentro del recinto, y también fuera de éste, ya que un helicóptero y agentes de los Mossos con ametralladoras han vigilado a la salida además de haber cortado la circulación completamente en la avenida del Estadi que da acceso al pabellón.

En un concierto de casi dos horas en Barcelona, su única parada en España, la cantante ha actuado para 12.000 personas, un público mayoritariamente menor de edad --sobre todo chicas, acompañadas de sus madres y padres--, que han ocupado buena parte del recinto desde la apertura de puertas.

Con un prolongado retraso de 45 minutos --ante el que el público ha arrancado a iluminar la grada con sus móviles y sobre el que ha manifestado en redes sociales la preocupación por la artista-- la joven estadounidense al final se ha decidido a aparecer después de la proyección de un vídeo con un contador indicando la cuenta atrás para su entrada triunfal.

Precedida por su saltirón cuerpo de baile masculino, Grandes ha saltado a la arena de riguroso negro y ha arrancado con un coreografiado y potente 'Be Alright', antes de transformar el escenario en un acortinado espacio teatral teñido de rojo para entonar 'Everyday', que ha ido intercalando con llamamientos como 'Venga, Barcelona'.

'Bad decisions' ha puesto rumbo a un imparable concierto copado por su potencia de voz, en el que ha seguido con un intimista 'Let me love you', canción tras la que la Grande ha desaparecido para regresar con un cambio de vestuario con el que ha pasado al blanco para interpretar 'Knew Better'.

Con 'Forever boy' la cantante ha mantenido al público a sus pies, pero el momento cumbre ha llegado con 'One last time', en el que la americna ha recibido todo el calor del público, linternas móviles incluidas alumbrando su presencia.

Sobre una proyección de inestables ondas de sonido, Grande ha regalado a sus fans la nostalgia de 'Touch it', canción que ha culminado con una notable potencia de voz que el público ha agradecido con una ovación, a la que la norteamericana ha respondido con una bordada 'Leave me lonely'.

EN BICI ESTÁTICA

Después de otro cambio de vestuario y de sacar a escena toda la instrumentación de su disco, Grande ha cantado 'Side to side' sobre una bicicleta estática -como en el videoclip-- y con la colaboración en vídeo de Nicki Minaj, dando paso a 'Bang Bang', de Jessie J, con la voz también de Minaj.

Con abanicos a toda mecha, los fans han recibido como una fiesta de confeti y danza 'Greedy', seguida de una hip hopera 'Focus', tras la que la cantante ha bajado el tono con la sentida 'I don't care', y aún ha creado más atmósfera después envuelta en una nube de humo para cantar a solas una respetada 'Moonlight'.

Tras un 'Barcelona, te quiero', Grande ha cantado 'Love me harder' que los fans han tarareado hasta la interpretación de la enérgica 'Breakfree', que la artista ha culminado declarando de nuevo su amor por la ciudad en inglés y en castellano, y pidiendo las manos en alto para recibir 'Sometimes' con una lluvia de globos.

Enfilando los últimos minutos de concierto, Grande se ha sentado en una escalera para ofrecer una pausada 'Thinking about you', retirándose para recibir vítores del público, que le ha conseguido sonsacar una dulce y muy imponente 'Somewhere over the rainbow'.

'Problem' ha encarrilado un final con toda la grada en pie dispuesta a saltar con los ritmos de 'Into you', con el que la diva ha dicho adiós a su auditorio, regresando para rematar la faena con 'Dangerous Woman.