La APM pide a los poderes públicos y privados que abandonen "la permanente tentación de presionar a los periodistas"

EUROPA PRESS 03/05/2017 12:03

La Junta Directiva de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa este miércoles 3 de mayo, ha acordado "reclamar a los poderes que abandonen de una vez, y para siempre, la permanente tentación de presionar a los periodistas".

"La libertad de prensa está afrontando en nuestro país presiones y amenazas procedentes de actores públicos y privados --gobiernos, administraciones públicas, partidos políticos de todo signo, grupos de presión financieros y de la sociedad civil-- con el objetivo de limitar la independencia de los medios y de los periodistas", ha denunciado.

Del mismo modo, la APM ha defiende en el texto que la respuesta a esas presiones debe ser el ejercicio del oficio de periodista con "rigor, honestidad, exactitud, imparcialidad y, ante todo, con lealtad a los ciudadanos".

La Junta Directiva de la asociación que preside Victoria Prego insta a los editores y directores de los medios "a que protejan y defiendan a sus periodistas y no cedan a las presiones", y exige a los poderes que, una vez denunciadas las presiones, "den explicaciones claras de su comportamiento y no traten de trasladar la responsabilidad a terceros".

En este sentido, ha acordado rechazar la pretensión de quienes lideran y representan la democracia de no respetar el derecho de los medios a adoptar sus decisiones sin injerencias externas; así como pedir a los grupos parlamentarios que deroguen o modifiquen las leyes que restringen la libertad de prensa, como, a su juicio, ocurre con la conocida por sus detractores como 'Ley mordaza', y que revisen los "'delitos de opinión' para adecuar nuestra legislación a los estándares internacionales.

Asimismo, reclama a los gobiernos y a los partidos la "máxima transparencia" en sus acciones y la obligación de dar explicaciones sobre ellas, y recuerda a jueces y fiscales que el secreto profesional es un derecho del periodista, a la vez que un deber que garantiza la confidencialidad de las fuentes de información.

Finalmente, la APM pide también a los ciudadanos que defiendan la libertad de prensa "como un valioso bien que merece ser protegido porque todo intento de debilitarla rebaja" la calidad de la democracia.