¿Te imaginas que tu ídolo aparece en tu boda por sorpresa? Esa increíble sensación la han vivido Max Singer y Kenya Smith, que en medio del baile de su boda han visto aparecer a Taylor Swift, a quien ambos admiran. Armada solamente con su teclado y con un elegante look para la ocasión, la estrella se plantó en el banquete y puso con su Blank Space banda sonora a una peculiar y emotiva boda que sin duda ninguno de los presentes olvidará.
Quien ha organizado la sorprendente actuación ha sido la hermana del novio, profundo admirador de la cantante country, que se puso en contacto con la artista hace dos meses a través de una carta en la que le explicaba que su madre había fallecido recientemente y que su hermano y su cuñada se casaron en el hospital para que la madre no se perdiera el momento más especial de la vida de su hijo.
Tras la muerte de la progenitora, los novios celebrarían con amigos y familiares el enlace y, para alegrar el momento, la hermana del novio pidió a la amiga de Gigi Hadid que actuara en la celebración. La cantante, que no duda en utilizar su fama con buenos fines, se emocionó con la historia, aceptó y se presentó como una invitada más pero con una sorpresa muy especial entre manos.
La nueva soltera de oro escogió el tema Blank Space porque el novio tenía un baile ensayado con su madre para esta canción, que les gustaba escuchar juntos. Además, Swift entregó al matrimonio un detalle, a modo de regalo de boda: un cartelito bordado en el que decía "Así que va a ser para siempre", (So it's gonna be forever) uno de los versos más conocidos del tema musical.
Llama la atención el hecho de que la primera aparición pública de Taylor Swift tras el fin de su relación con Calvin Harris sea precisamente en un evento tan romántico como una boda y cantando una canción que compuso como defensa a las críticas de la prensa por tener tantas parejas sentimentales.