Un nido de chimpancé es más limpio que tu cama

Noticias Cuatro 20/05/2018 19:40

Más de un tercio de las bacterias que se encuentran en las camas humanas provienen de nuestros propios cuerpos, ya sea piel, oral o fecal. La estudiante de doctorado Megan Thoemmes, autora principal del artículo, publicado en la revista Royal Society Open Science, explica que ella y sus colegas "querían compararlo con algunos de nuestros parientes evolutivos más cercanos".

Los chimpancés construyen camas frescas a partir de ramas y hojas todos los días, informa The Guardian. Thoemmes dirigió un equipo de investigadores que recolectó hisopos de 41 nidos de chimpancés en Tanzania y descubrió que contenían significativamente menos bacterias corporales que una cama en el hogar humano promedio. "No encontramos casi ninguno de esos microbios en los nidos de chimpancés, lo cual fue un poco sorprendente", dijo.

Incluso cuando buscaron artrópodos como pulgas, piojos y garrapatas en 15 de los nidos, los científicos salieron casi con las manos vacías. "Solo se encontraron cuatro ectoparásitos en todos los nidos", dijo Thoemmes. "Y eso son cuatro especímenes individuales, no cuatro especies diferentes".

Se ha estimado que hasta un tercio del peso de la almohada usada de una persona puede estar compuesto por piel muerta, ácaros del polvo y sus heces. El edredón de un hogar estándar podría contener unos 20.000 ácaros, mientras que un colchón usado típico puede contener hasta 10 metros de ellos. Aunque se descubrió que los nidos de chimpancé contenían una selección más diversa de microbios, esos microbios parecían provenir de los alrededores de los nidos, no de los propios chimpancés.

El estudio de la NCSU concluye que los seres humanos "hemos creado lugares para dormir en los que nuestra exposición al suelo y otros microbios ambientales prácticamente ha desaparecido, y en su lugar estamos rodeados de microbios menos diversos que provienen principalmente de nuestros propios cuerpos".Y eso puede haber aumentado nuestra vulnerabilidad a las alergias y otras enfermedades.

"De alguna manera", indica Thoemmes, "nuestros intentos de crear un ambiente limpio para nosotros mismos pueden, en realidad, hacer que nuestro entorno sea el menos ideal".