La bacteria que resiste a los desinfectantes de los hospitales

cuatro.com 02/08/2018 11:42

Las especies bacterianas resistentes al tratamiento, se han convertido en una fuente creciente de preocupación para los trabajadores de los hospitales, como el Staphylococcus aureus no vulnerable a la meticilina.

Por ello, los centros han adoptado estrictos procedimientos de higiene para evitar que los microbios peligrosos infecten a los pacientes, que a menudo implican el lavado de manos con desinfectantes a base de isopropilo o alcohol etílico.

Un nuevo estudio, publicado en Science Traslational Medicine, revela que la bacteria Enterococcus faecium, resistente a múltiples fármacos, se está volviendo cada vez más tolerante a los alcoholes utilizados en los desinfectantes para lavarse las manos de los hospitales.

Los expertos de la Universidad de Melbourne (Australia), tomó muestras bacterianas de dos hospitales del país durante 19 años. Los resultados sugieren que Enterococcus faecium se está adaptando a esta forma de control de la infección, que se utiliza en las instalaciones sanitarias de todo el mundo.

Es más, las infecciones por E. faecium resistentes a los medicamentos han aumentado a pesar del uso de desinfectantes de alcohol, y actualmente representan una de las principales causas de contaminación adquirida en los hospitales.

Estos datos tan alarmantes ha impulsado al equipo de científicos a investigar las causas por las cuales esta bacteria se hace tan resistente a los alcoholes.

Combatir la resistencia bacteriana

Los expertos examinaron 139 muestras de E. faecium, recolectadas previamente entre 1997 y 2015, y analizaron la supervivencia de cada ejemplar cuando se exponía a alcohol isopropílico diluido.

Las conclusiones a las que han llegado los expertos son que la bacteria se ha hecho más resistente a los desinfectantes, tal y como muestran los datos obtenidos en 2009 comparados con el año 2004.

Otro dato obtenido en la investigación ha sido que las deferentes cepas de E. faecium colonizan mejor en las jaulas de limpiadas con toallitas de alcohol isopropílico. Esto se debe a las mutaciones que estas bacterias han sufrido en sus genes.

El análisis del genoma bacteriano reveló que las muestras tolerantes albergaban varias mutaciones en genes implicados en el metabolismo que conferían una mayor resistencia al alcohol. Los autores apuntan la necesidad de examinar las muestras en hospitales de otras regiones geográficas antes de poder extraer conclusiones importantes.

“Los esfuerzos globales para mitigar la resistencia bacteriana deberían considerar cómo los microbios pueden adaptarse no solo a los fármacos, sino también a los alcoholes y otros ingredientes utilizados en los desinfectantes”, concluyen.