El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha ordenado la nacionalización inmediata de cinco empresas metalúrgicas situadas en la Guayana venezolana. Chávez ha asegurado que esta es una forma de terminar con la crisis sindical que arrastran estas empresas desde hace meses.
Las compañías afectadas son Matesi, Comsigua, Orinoco, Irons, Venezolana de Prerreducidos Caronía (Vemprecar) y Cerámicas Carabobo. "Estas empresas tienen que estar bajo control obrero, así tiene que ser", ha afirmado el mandatario venezolano que también ha dicho que esta decisión debió haberse tomado "hace tiempo" tal y como habían pedido los sindicatos. Estos alegan que algunos empleados llevaban hasta seis meses sin cobrar.
Además, Chávez ha intervenido las plantas de inyección de gas pertenecientes a la estadounidense Williams Companies, PIGAP II e IGF El Furrial. Ahora serán controladas por Petróleos de Venezuela (S.A.)
Al llegar a la planta de PIGAP II situada en el estado de Monagas, al este del país, el presidente venezolano ha festejado la "nueva etapa" en las operaciones petroleras del país.
El Gobierno venezolano ha nacionalizado 76 empresas en tan sólo dos semanas,35 de ellas pertenecientes a la actividad petrolera. El Estado deberá pagar una indemnización a las compañías expropiadas y garantizar a todos los empleados su puesto de trabajo.