Industria propone la subida de las facturas de la luz de los hogares y pymes un 4 por ciento

CNN+/Cuatro 08/06/2010 17:18

El Ministerio de Industria propone que las tarifas eléctricas de acceso suban en julio un 10 por ciento para los hogares y pequeños comercios y un 5 por ciento para la mediana industria, en tanto que para los grandes consumidores (cementeras, químicas o siderúrgicas) opta por mantenerlas estables.

Así se recoge en la propuesta de orden ministerial para la revisión de las tarifas de acceso que retribuyen costes regulados como el transporte, la distribución o las primas a las renovables.

Según fuentes del mercado, este aumento en los peajes de acceso supondría un incremento de en torno al 4 por ciento de la tarifa eléctrica de último recurso (TUR), la única que fija el Gobierno y a la que pueden acogerse 26,8 millones de hogares y pymes (potencias contratas iguales o inferiores a los 10 kilovatios).

Además, en julio el IVA que se aplica en el recibo de la luz se elevará del 16 al 18 por ciento.

En el cálculo de la TUR influyen los peajes de acceso los impuestos y el resultado de las subastas CESUR para la adquisición de la energía, que, según los expertos, arrojarán un precio superior al de las celebradas para establecer la tarifa del primer semestre.

Entre otros conceptos, los peajes retribuyen elementos regulados como las primas a las renovables o el déficit de tarifa que se genera porque los ingresos obtenidos vía recibo de la luz no cubren todos los costes que soporta el sistema.

"Mejoras técnicas"

El Ministerio de Industria ha insistido en que no puede dar cifras sobre cuál será la evolución de la tarifa eléctrica de último recurso (TUR) en julio, ya que aún no se han celebrado las subastas CESUR para la adquisición de la energía, que se harán a finales de mes.

Fuentes del ministerio han recordado que, además, se van a introducir "mejoras técnicas" en los mecanismos que rigen estas subastas, al tiempo que se estudia rebajar su periodicidad (actualmente semestral) con el objetivo de que los consumidores paguen el menor precio posible.

Además, el ministerio Industria ha decidido eliminar de la factura el pago por el alquiler de los contadores analógicos, que son los que tiene la gran mayoría de los usuarios y que suponen en torno al 1,4 por ciento del recibo.

Rechazo de las asociaciones de consumo

El portavoz de la confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), Antonio López, ha manifestado que "si finalmente este aumento del precio de la luz es aceptado por la CNE", será "absolutamente inaceptable que, en un momento de crisis profunda y con una inflación que no llega al uno por ciento, se penalice así a familias y pequeños consumidores".

"Es una afrenta en toda regla, en este momento de crisis. Si la subida rondase la inflación o incluso estuviera unas décimas por encima del IPC, podríamos estar de acuerdo, pero en ningún caso podemos aprobar una subida del diez por ciento porque es una cifra del todo descabellada", ha advertido.

En la misma línea, la portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverniceanu, ha rechazado frontalmente una subida de la luz por encima del IPC porque, en estos momentos, cualquier aumento superior a esa cifra es "un golpe directo a la línea de flotación del consumidor".

Tras recordar que en este contexto de crisis, "con expectativas de mejora aún muy lejanas, una subida en un servicio básico como la luz, aunque sea en la tarifa de acceso, es un golpe importante para los bolsillos, que además coincidirá con el aumento del IVA de julio y puede que a algún otro incremento fiscal".

La portavoz de la OCU ha advertido además de que este aumento aplicado en la tarifa de acceso repercutirá sobre muchas personas que han traspasado su contrato a compañías liberalizadas y que "no saben que estas empresas actualizan sus precios con las tarifas de acceso y no con las de último recurso".