El Gobierno cubano inicia el acercamiento de los presos políticos

Cuatro/CNN+ 02/06/2010 11:41

Al menos seis presos políticos cubanos han sido trasladados este martes a centros penitenciarios más cercanos a los lugares de residencia de sus familias, según ha informado el Arzobispado de La Habana en un comunicado.

"El cardenal Jaime Ortega, arzobispo de La Habana, ha sido informado por parte de las autoridades de que se ha procedido al traslado de seis prisioneros hacia sus provincias de residencia", señaló el Arzobispado en el documento enviado a los medios.

El presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez, ha confirmado este hecho.

Los reclusos que han sido trasladados son Félix Navarro, Antonio Díaz, Arnaldo Ramos, Iván Hernández, Diosdado González y José Luis García, aseguró el presidente de la CCDHRN.

Son de la 'Primavera Negra'

Los prisioneros que están siendo trasladados forman parte del grupo de 75 opositores encarcelados en 2003 durante la campaña de detenciones realizada por las autoridades cubanas, la conocida como 'Primavera Negra' cubana.

Con estos movimientos se cumple el compromiso que el Gobierno liderado por Raúl Castro adquirió a finales de mayo con la jerarquía de la Iglesia Católica de acercar a los presos políticos a cárceles ubicadas en sus provincias de origen.

Empeora la salud de Fariñas

Por su parte, el periodista y psicólogo disidente cubano Guillermo Fariñas ha sufrido una nueva crisis como consecuencia de una nueva infección bacteriana que ha obligado a los médicos a retirarle la vía parenteral por la que le estaban suministraban los elementos alimentarios necesarios para paliar los efectos de su huelga de hambre, iniciada hace ya 98 días.

Desde la sala de cuidados intensivos del Hospital Arnaldo Millán Castro (Santa Clara), en la que está ingresado desde el pasado 11 de marzo, su esposa, Clara Pérez Gómez, calificó de "crítico" el estado de Fariñas, aunque precisó que no había perdido el conocimiento en ningún momento y que los médicos habían conseguido reducir su fiebre hasta los 39,1, tras haberse disparado.