Al menos cuatro miembros de las fuerzas de seguridad han muerto este lunes como consecuencia de un tiroteo por parte de supuestos insurgentes en Pakistán. El ataque se ha producido en la ciudad noroccidental de Peshawar cuando un grupo armado se dispuso a disparar a un furgón policial que realizaba una patrulla rutinaria.
Los insurgentes no identificados han matado en el acto a dos de los ocupantes del vehículo, mientras que los otros dos han fallecido cuando eran trasladados al hospital. Las víctimas eran un subinspector, dos agentes y un conductor.
Por el momento, ningún grupo ha reivindicado la responsabilidad de la acción, aunque Peshawar es escenario frecuente de ataques integristas y cuenta con una activa `presencia talibán.