La Cumbre Iberoamericana ha respaldado una declaración sobre Honduras de la Presidencia portuguesa que condena el golpe, considera "un paso fundamental" para recuperar la normalidad la restitución del destituido Manuel Zelaya y apoya el dialogo nacional en Honduras.
"Condenamos el golpe y consideramos inaceptables las graves violaciones de los derechos humanos
y de las libertades al pueblo hondureño", señala el texto. Considera asimismo "un paso fundamental para el retorno a la normalidad" la restitución de Zelaya, y pide que termine "el hostigamiento" a la embajada de Brasil en Tegucigalpa y que se garantice "su inviolabilidad y la de las personas bajo su protección".
La posición de España
El jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, confia en que Porfirio Lobo y Manuel Zelaya faciliten un nuevo acuerdo nacional que fije plazos y procedimientos para restaurar el orden democrático y sin el que España no podrá reconocer un nuevo presidente.
En una conferencia de prensa tras la Cumbre Iberoamericana, Zapatero ha precisado que, "a día de hoy, no habría condiciones" para que el Príncipe de Asturias asista a la toma de posesión de Lobo como presidente de Honduras, prevista para el 27 de enero, y ha advertido de que es "fundamental" lograr antes un gran acuerdo nacional que reclama España y la comunidad iberoamericana.
También elecciones locales
Por otra parte, los primeros datos, no confirmados por las autoridades electorales, adjudican al Partido Nacional de Porfirio Lobo un total de 256 alcaldías, frente a las 46 conseguidas por el Partido Liberal de Elvin Santos, con un 60 por ciento de los votos escrutados, según ha informado el diario local 'El Heraldo'.
Es la primera vez que el Partido Liberal apenas consigue el control de un muncipio en feudos históricos de su agrupación. Es el caso del departamento del Yoro, cuna del presidente interino Roberto Micheletti.