¿Cómo se convierte un hombre aparentemente integrado en un terrorista?
Nadie en Ripoll se explica cómo un chico del pueblo, perfectamente integrado y con hábitos normales de un chaval de su edad pudo convertirse en un terrorista sanguinario
Younes Abouyaqoub nació en Marruecos, pero vivía en Ripoll desde niño. En sus calles creció, correteó y jugó. Todos le conocían. Le recuerdan simpático y sociable. Dicen que siempre se le podía encontrar en las canchas de fútbol sala, como a su hermano, Houssaine, uno de los terroristas abatidos en el tiroteo de Cambrils.
Younes era además un buen estudiante. Terminó sus estudios de electromecánica y ahora destacaba por su profesionalidad como soldador en una conocida empresa metalúrgica de la zona. Lo consideraban el ejemplo a seguir para la comunidad musulmana.
Entonces, ¿qué se torció? En Ripoll todos señalan al mismo responsable: el imam Abdelbaky Es Satty. Dicen que los reclutó mediante largas conversaciones en lugares privados. Inculcándoles el odio, alejándolos de sus hábitos y de sus allegados.
Younes dejó de acudir a la mezquita, pero empezó a parar para rezar en sus viajes. El salafismo más radical se fue instalando en él. Ahora, echando la vista atrás, los amigos más cercanos sí recuerdan un cierto cambio y su alejamiento en los últimos meses. Pero jamás nadie pudo imaginar que estuviera planeando una matanza.