Lo que parece un tranquilo fin de semana de Castle en una convención de Ciencia Ficción, acaba en un nuevo y misterioso asesinato. El escritor acude a la convención para firmar a sus fans su última novela y Beckett le lleva hasta el escenario del nuevo crimen. Se trata de la recreación de la mítica nave espacial de Nebula-9’, una serie de televisión de la que la inspectora era una fan total.
“La serie es cutre, pero la nave mola”, dice Castle poco antes de ver por primera vez a la víctima y descubrir que fue asesinada con… ¡¡una pistola láser!! Este caso promete.
La víctima tiene una profunda quemadura en forma de cilindro, pero, ¿quién cometió semejante crimen?, ¿cuál fue su motivo? y... ¿cómo demonios encontró un arma así? La pareja de moda de la televisión se pone a trabajar hasta que encuentran a un sospechoso con las manos en el láser.
Tras varios interrogatorios, Castle y Beckett siguen sin encontrar al criminal, así que lo mejor es acudir al lugar del crimen. Mientras Castle intenta sacar información a Beckett sobre su fantasía sexual en la nave de Nébula-9, al escritor se le revela una pista crucial en el caso. Y es que a veces la suerte también juega del lado de Castle para elaborar sus teorías.
Con el caso resuelto, Castle consigue que Kate acepte a recrear una de sus fantasías sexuales de la adolescencia: una noche apasionada con una de las atractivas oficiales de Nébula-9. Para ello, promete llevar el desayuno a la cama a Beckett durante una semana, hacer la colada y una sesión intensiva de Nébula-9, pero la fantasía no termina como espera.