Currar, placer, correr

Jorge Alonso 24/02/2014 10:53

Hay pocos momentos en la vida en los que currar se convierte en un placer, por eso, quiero trasmitir el que viví hace unos pocos días.

Sucedió en Castellón grabando un reportaje sobre el posible impacto de las prospecciones petrolíferas para Noticias Cuatro.

Uno de los días, concretamente el jueves 6 de febrero, teníamos previsto ir a la reserva natural de las Islas Columbretes para grabar allí. Desayuno en el hotel incluyendo dos biodraminas con cafeína para aguantar las 6 horas de travesía y a las 8 de la mañana navegando.

Las 3 horas de ida se convirtieron ya en un placer, navegar con buena mar viendo amanecer en la proa sintiendo la brisa y grabando imágenes espectaculares, hace que te reconcilies un poco con el mundo.

Alrededor de las 12 del mediodía y con buen tiempo, nos autorizaron a desembarcar en la Isla, (illa Grossa), pero con un pesado límite, ¡SÓLO MEDIA HORA! Poco tiempo para que un solo cámara Jesús grabará toda la isla y las entrevista que quería hacer Roberto. Así que, acordamos que él se dedicara a entrevistas y yo con una cámara de fotos que graba video en la mano haría los paisajes.

Cogí la cámara, mire la el paisaje, una isla volcánica con forma de herradura que forma una pequeña bahias. Subí la cuesta del embarcadero y llegue a un sendero que la recorre de punta a punta por la cresta, distancia total 1 kilómetro. Brisa fuerte en la cara, un terraplén a cada lado y mar, mucha mar y pensé ¿POR QUÉ NO?

Y ME PUSE A CORRER, corría con la cámara en la mano y miraba a ambos lados de lo que me empezó a parecer el paraíso, (he de reconocer que la biodramina ayuda :-). Llegué hasta la punta norte de la isla y empecé a grabar, norte, sur, este, oeste todo era digno de grabarse. Acantilados, puntas de roca, mar, rompientes, una estatua, un pequeño cementerio de fareros, todo era pura imagen acompañada del sonido del viento y las olas.

Acabadas las primeras tomas eche a correr de nuevo y en ese momento pensé en el privilegio que suponía estar allí grabando y corriendo, en que pocas personas en el mundo podrían decir que habían hecho lo que yo estaba haciendo, en el poco esfuerzo que me costaba correr por allí a pesar de alguna que otra cuesta y DISFRUTE.

Llegué a la punta sur, al faro blanco resplandeciente que corona la parte más alta de la isla y lo grabe con todo el detalle que pude.

Todavía me quedaba algo de tiempo, sentía la necesidad de conocer la isla entera, recordé un desvío que había pasado y corrí. El camino que me faltaba era una bajada pronunciada por la parte este de la isla que llegaba hasta un antiguo embarcadero que ya no se usa, desde ahí se ven dos islas más, (illa Ferrera e illa Foradada), y fuertes olas rompiendo contra las rocas salpicándome, una pequeña ducha que vino bien. Hice mi trabajo y empecé a subir la cuesta para volver al camino principal y lo hacía con una facilidad que ya me hubiera gustado tener en algunas carreras a pesar de ir en vaqueros.

¡SE ACABO EL TIEMPO! en el camino estaba todo el equipo volviendo hacía el barco, me uní a ellos pero no me pude resistir y le pedí a Jesus que me grabara unos planos corriendo. Este blog estaba naciendo y me parecía una gran forma de empezar, lo hizo muy bien como podéis ver en el VIDEO.

La vuelta con una mar bastante picada que nos obligo a estar dentro del barco. Tres horas hablando con uno de los guardas de la isla. Hablamos de correr, ellos también lo hacían en la isla, pero sobretodo de su vida y su trabajo. Nos contó lo que supone vivir quince días con otras tres personas totalmente aislados una vez al mes y nos abrió los ojos hasta darnos cuenta que incluso el paraíso se puede convertir rápidamente en el infierno. FUE UNA GRAN LECCION.

Paso a paso y sin perder de vista el suelo.

PD:

¡Sabia que algo importante se me olvidaba contar! Esta pequeña aventura acabo en la taberna del puesto de Castellón degustando, entre otras cosas el autentico arroz a banda de los pescadores. De todo esto, por supuesto, hay prueba gráfica.

Las pocas calorias gastadas en la carrera fueron restituidas, ampliadas y regadas de manera inmediata.