Desde que el 19 de marzo, Jesé Rodríguez conociera el alcance de su lesión no ha tenido otra cosa en la mente que volver a ponerse las botas y saltar al césped. La rotura del ligamento cruzado anterior que se produjo ante el Schalke en Champions ha tenido al canterano del Real Madrid 259 días alejado de los terrenos de juego. Ante el Cornellá, el Santiago Bernabéu vuelve a ver a uno de sus jugadores preferidos vestido de blanco.
Jesé ha querido estar cerca de los aficionados desde la noche de la lesión para devolver el cariño que ha recibido desde ese fatídico día. La noche que se lesionó ya mostró su agradecimiento por los mensajes y dos días después ya lo tenía claro en su cuenta de Twitter: "Ha sido un palo duro sufrir esta lesión, pero sin duda voy a volver siendo mejor persona y mejor jugador".
Más de ocho meses de recuperación, trabajando durante el verano para poder regresar cuanto antes y mejorando poco a poco hasta ponerse en forma. Jesé nunca ha perdido la motivación para regresar mejor que cuando se lesionó y así lo ha contado en las redes sociales. "Puede que no haya llegado todavía, pero estoy poco más cerca que ayer", decía el canterano a finales de junio. Este martes, 2 de diciembre ese día ha llegado y Jesé Rodríguez ha superado un calvario que ha durado 259 días.