El capitán del Real Madrid se encuentra de vacaciones y sigue sin conocer donde pasará sus próximos años como guardameta. Pasando el tiempo como puede, se entretiene en la piscina recordando lo que mejor sabe hacer. El club blanco comienza la pretemporada el 12 de julio y mientras todo se prepara para el inicio de esta, el futuro del portero es incierto y es que desde las altas esferas del Real Madrid siguen pendientes del posible fichaje de David De Gea, aunque si este no llega, se tantean a otros como Leno, Casilla o Lloris. París, Londres, Roma o incluso Madrid, muchos son los destinos de los que se hablan para Iker.
Mucho ha llovido desde que se convirtiese en el héroe de la final de la Champions en esos mágicos 25 minutos contra el Bayer Leverkusen, hecho que le supuso ganar también la titularidad en el famoso y raro Mundial de Japón y Corea. Desde entonces todo fueron éxitos, todo fueron alegrías. El ’Santo’ era un ‘Dios’ en el Bernabéu, hasta el día en que su camino se cruzó con Mourinho.
Casillas quiere recuperar la versión que hizo campeona del mundo a España y siendo el fútbol como es, quién sabe todo lo que le queda por vivir a este ’mito’ del fútbol. Ya sea en su ciudad natal, en la ciudad romana o en la londinense, Casillas espera terminar estas vacaciones de la mejor manera posible y sobre todo espera conocer su futuro y recuperar ese don al alcance de muy pocos.