Álvaro Arbeloa subió a Twitter una foto del trofeo más preciado que se llevó de Anfield: la camiseta de Steven Gerrard, leyenda viva del Liverpool. Conseguirla no le fue fácil: el canterano madridista se fue derecho al capitán 'red' al finalizar el encuentro y éste frenó su ímpetu. Indicándole con el dedo el túnel de vestuarios le pidió paciencia para no intercambiar camisetas delante de su afición tras un encuentro nefasto para su equipo'. Un gesto enorme para con su hinchada que dice mucho de él.
No todos tuvieron el mismo acierto en el encuentro. El triste protagonista de la noche fue Mario Balotelli, que fue sustituido al descanso, y no sólo por su pobre rendimiento. Al término de los primeros 45 minutos, el delantero italiano se marchó al túnel de vestuarios intercambiando su camiseta con la de Pepe. Lo hizo con 0-3 en el marcador, en el descanso y a la vista de todo el mundo. Un modus operandi muy distinto al de su capitán.
Brendan Rodgers, su entrenador, se mostró molesto aunque afirmó haber zanjado el tema después tener una conversación con el delantero sobre "la cultura del Liverpool". No quiso aclarar si el feo gesto del italiano influyó en su sustitución o si ésta se debió a razones exclusivamente deportivas. Lo que sí está claro es que la acción de 'Supermario' no gustó nada a los aficionados, que lo hicieron TT en Inglaterra durante varias horas a base de críticas.