El cierre de Iker Jiménez: los peligros del 'Charlie Charlie' en adolescentes

cuatro.com 22/06/2015 02:05

"Decía el admirado y siempre recordado Félix Rodríguez de la Fuente que el halcón pelegrino era el animal que más le fascinaba porque daba la impresión de que era el gran oteador del universo, que era una posición de privilegio observar los montes, los cambios, situarse a 400 kilómetros por hora y sobretodo la sensación de estar avistándolo todo. El periodista, de alguna forma, realiza esa misma labor. Está constantemente viendo la vida y siendo un poco esponja. El periodista que ya no es solo un oficio, es una forma de estar en el mundo. No hace falta ser periodista para estar atento a todo lo que está pasando y, ¡vaya si están pasando cosas en nuestro mundo! Un mundo cambiante, transformándose permanentemente.

Me gustan mucho las pequeñas historias, algunas las contamos aquí por lo que significan, por su proyección. Hace poco hablaba Diego Marañón en el misterio 4.0 de ese juego que se ha puesto de moda con lápices, una ouija primitiva, sencillísima, pero qué bien ideada, el famoso juego de ‘Charlie Charlie’. Evidentemente fuimos los primeros, con Diego, en informar del viral que trae todo esto, de la campaña publicitaria y de la sinsustancia que rodea a un pasatiempo que en el fondo persigue promocionar una serie de cosas, pero que se ha convertido por la fuerza de la red en una marea.

Me quedé muy pensativo al saber que niños de 9 años hablaban del ‘Charlie Charlie’. Nos enteramos de que era una campaña publicitaria. Tiene todo su derecho de intentar sacar el máximo rendimiento, me parece perfecto. Pero, ¿qué ocurre cuándo esa información queda ya ahí? ¿Un niño que puede hacer un sistema para comunicar con los muertos? Podemos decir que, sabiendo como sabemos que le tema de la ouija no es una tontería, mediante una tabla y un vasito de yogurt no podemos contactar con los espíritus, puedo estar de acuerdo. Pero lo que se desencadena delante del tablero en la adolescencia o en mentes poco hechas con la creencia de estar en algo sobrenatural ha acarreado muchos problemas psicológicos, psiquiátricos, suicidios… Hay que decirlo porque es así".