Violet no sobrevivió a su intento de suicidio

cuatro.com 26/04/2012 01:40

Tate se entera de la decisión de Ben de internar a Violet en un instituto debido a sus reiteradas faltas de asistencia. Consternado ante la idea de separarse de su chica, droga al progenitor con cloroformo y le plantea a la muchacha un suicidio en pareja para poder estar juntos eternamente.

Aterrorizada, Violet huye llamando a gritos a su padre. Al no encontrarle, escapa de la casa. Sin embargo, en cuanto sale por la puerta vuelve a aparecer otra vez dentro de la mansión. Tate tiene entonces que revelarle que no sobrevivió a su intento de suicidio con pastillas y ahora es otro de los fantasmas del lugar.

Durante días, el muchacho ha intentado que su chica no supiera la horrible realidad. Incluso mató a un fumigador que se acercó demasiado al lugar donde está oculto el cadáver de la hija de los Harmon.

Por otra parte, la policía investiga el asesinato de Travis, al que la prensa ya ha bautizado como el 'joven de la Dalia' por el paralelismo con el crimen de la 'Dalia Negra' en 1947. El asunto, además, saca a la luz antiguos crímenes en la casa, que le achacan a Constance.

Los cargos contra la vecina son retirados cuando Larry se autoinculpa del delito aportando el arma homicida. En el sótano de la casa, el criminal pudo ver los fantasmas de su exmujer y su hijas, lo que le llevó a tomar una importante decisión. Ya en prisión, le explica a Constance que quiere expiar sus pecados y sólo le pide que le diga que alguna vez le quiso, a lo que ella se niega.

Descubrimos que Constance sedujo a Larry alrededor de 1994 sólo para poder volver a la casa en la que vivió diez años antes. Tate odiaba a su padrastro, entre otras cosas porque mató a su hermano. Un día acudió al banco en el que trabajaba y le quemó a lo bonzo tras rociarle de gasolina. Desde entonces es el desfigurado vagabundo que conocemos.