Un bombero elige entre una morena con curvas y una rubia ‘boom’ en ‘Adán y Eva’

cuatro.com 11/11/2014 23:52

Cuando le ha visto acercarse, con su cuerpo musculado, sus tatuajes y su pelazo, nuestra Eva le ha rechazado por completo: “A mí ese rollo ‘chuliboy’ no me gusta para nada. Físicamente no es mi tipo de hombre”. Alejandro tampoco ha estado conforme: “Es bastante grande y no me atrae nada pero quiero disfrutar con ella de esta experiencia”.

Alejandro: “Me considero un regalito, no sé cómo no tengo novia”

Alejandro es un valenciano que trabaja como bombero y que se tiene en muy buena consideración: “Sinceramente, yo pienso de mí que soy como un regalito. Tengo un trabajo fijo, una casa, soy una buena persona, un chico divertido y espontáneo. Tengo buen físico, dinero, una familia estructurada…La verdad es que no sé por qué no tengo pareja”, ha dicho el nuevo Adán sobre sí mismo.

Montse: “Yo no tengo ningún tipo de complejo”

Montse es una mujer muy segura de sí misma. Aunque tiene un cuerpo muy diferente al de su Adán, es tan confiada como él: “Me dicen que soy muy morbosa y muy sexy y no tengo ningún tipo de complejo. A veces, me gustaría ser más alta o pesar seis kilos menos pero estoy muy orgullosa de mi cuerpo y, en esta isla voy a encontrar a mi media naranja, como me llamo Montserrat”, ha dicho antes de quitarse toda su ropa.

Alejandro: “Soy un superhéroe del siglo XXI”

Alejandro ha querido que Montse adivinara su profesión dándole esta pista: Soy un superhéroe del siglo XXI”, ha dicho, mientras se asustaba porque se le acercaba una avispa. Nuestra Eva le ha dicho que la profesión que más le gusta es la de bombero y, casualidades de la vida, es justo a lo que se dedica su Adán.

Alejandro se lleva latas de atún al Paraíso

El programa ha preparado una suculenta comida para sus nuevos habitantes: una pizza para compartir, pasta y una botella de vino. Al romántico estilo italiano. Sin embargo, Alejandro, que se alimenta de arroz hervido para mantener su cuerpo, ha preferido seguir con su dieta y ha sacado de su bolsa unas ‘deliciosas’ latas de atún.

Sonia: “Yo a Alejandro le haría un favor y, más de uno, también”

Sonia y Alejandro han sentido una atracción sexual mutua e inmediata. Los dos tienen dos cuerpos trabajados, tatuados y morenos y ella se ha mostrado muy interesada en él: “A mí los bomberos, me encantan. Apagan fuegos. Yo a Alejandro le haría un favor y, para hacerle uno, no le haría ninguno, le haría uno detrás de otro”: Traduciendo esta frase, la rubia ha querido decir que si le prueba, no podría parar de comerle. Como buena serpiente.

Alejandro a Sonia: ¿Qué llevas dentro de la bolsa, un consolador?”

Sonia ha utilizado el cuerpo de Alejandro como un lienzo para hacerle dibujos por tardes partes. Sí, por todas partes. Antes de sacar los botes de pinturas de su bolsa, Alejandro ha creído ver dentro la bolsa de su Eva un consolador pero las intenciones de la rubia eran mucho más inocentes.

Comienza la atracción entre Montse y Alejandro: masajes y besos en el cuello

Aun teniendo una atractiva rival dentro de la isla, Montse es una mujer con un gran poder de seducción. Adán y Eva han tenido un erótico encuentro en el que el musculoso Alejandro ha vendado los ojos a Montse para darle un masaje y darle un beso en el cuello.

Contra todo pronóstico, Alejandro elige a Montse para comenzar una relación

Alejandro ha dejado a un lado todos los prejuicios con los que llegó a la isla y, en vez de quedarse con su prototipo físico de mujer- una rubia con buen cuerpo y llena de tatuajes como él- ha optado por la personalidad y la inteligencia de Montse.