En un comunicado, el Ministerio ha señalado que el objetivo del ataque cibernético eran los proveedores de Internet en Palestina, cuyos servidores han recibido millones de mensajes y han sido paralizados, retrasando el acceso a los usuarios de territorio palestino.
El Ministerio ha informado de la creación de un equipo de gestión de crisis que está trabajando con los proveedores y la compañía de telecomunicaciones Palter para tratar de controlar los ataques.
Además, el Ministerio también se ha puesto en contacto con expertos en seguridad cibernética para ayudar a contener la crisis y detener su impacto sobre los usuarios.