Tras guardar seis meses de silencio la princesa Corinna habla del rey en la revista Vanity Fair. Se refiere a él como "un señor mayor que está luchando por su salud". Así, ve al monarca con el que confiesa mantener una estrecha amistad y matiza que "hay cosas que pasan en un momento dado y luego se acaban, pero la amistad no termina". Va más allá al asegurar que "siguen en contacto" y que don Juan Carlos "llama a sus hijos una vez por semana". Al hablar de negocios, la princesa reconoce que trabajó para el Fondo de Infraestructuras Hispano-Saudí, pero niega haber "hecho negocios para el rey o haber cobrado dinero en su nombre". Cuando le preguntan si conoce a la reina, dice que se cruzó con ella una vez "por accidente". Concluye la conversación asegurando que no está en sus planes volver a España porque "no sería apropiado ni inteligente".