Después de trabajar en Venezuela por más de 65 años ahora hace 20 horas semanales
La emotiva historia de Óscar: cumple el sueño de su abuelo de vivir los Sanfermines desde Pamplona
A sus 73 años, Rafael revisa su teléfono para recibir un pedido. “Tenemos el pedido, ahora a entregarlo”, asegura. Cada día recorre unos 70 kilómetros con su bicicleta para hacer las entregas, sin intención alguna de parar, según informa Laura Arias y Quim García. “Yo no me quiero jubilar porque estoy ahora viajando”, añade.
Después de trabajar en Venezuela por más de 65 años, ahora hace 20 horas semanales. Tiene contrato fijo y vacaciones: “Hay unos que nacen para estar sentaditos, bien tranquilitos, pero yo no nací para eso”, sentencia.
“Es duro pero a mí me encanta", confiesa Rafael
Rafael es abuelo de cuatro nietos. Podría vivir de su pensión, pero está firmemente comprometido con su labor. “Es duro pero a mí me encanta. Haces mucho ejercicio. Normalmente todos pagan por estar en un gym y son bien caros, pero mira cuál es mi gym. Es muy divertido”, afirma.
En una profesión donde abundan los repartidores más jóvenes, el pedaleo de Rafael no pasa inadvertido por las calles. “He tenido algún problema de tiempo y habrán dicho 'tenía que ser este viejo'”, destaca el hombre con una sonrisa. Mientras mantenga su energía y actitud positiva, los pedidos de Rafael seguirán llegando a golpe de pedal.