La pérdida de equilibrio: el primer signo de envejecimiento y deterioro físico

Aguantar a la pata coja diez segundos es uno de los mejores indicativos para valorar la pérdida de equilibrio
La actividad física es fundamentar para evitar la pérdida de equilibrio, movilidad y masa muscular
Un ambulatorio de A Coruña organiza caminatas para sus pacientes: andar es la mejor pastilla
Envejecer trae consigo la pérdida de ciertas capacidades. La primera que se pierde es el equilibrio, una competencia fundamental para evitar lesiones y caídas en la tercera edad. La actividad física es una de las asignaturas pendientes de muchos mayores, pero, sin embargo, es esencial para frenar el rápido deterioro físico que se sufre a partir de los 50 años.
La pérdida de equilibrio es el factor más determinante a la hora de sufrir lesiones y accidentes. Una de cada tres personas mayores de 65 años se cae al menos una vez al año y el 20% de ellas sufren lesiones graves. Envejecer de forma activa es crucial para evitar incidentes que pueden costar un viaje al hospital. ¿Cómo podemos comprobar que nuestro equilibrio está en regla? Con una sencilla prueba apta para todas las edades: aguantar a la pata coja.
Se una observa pérdida de equilibrio si se aguanta menos de 10 segundos a la pata coja
Un ejercicio tan simple como la pata coja nos puede ayudar a comprobar en qué estado se encuentra nuestro cuerpo. Lo más recomendable es aguantar más de 10 segundos con la pierna no dominante. Si el aguante es menor, es esencial ponerse en manos de profesionales para ejercitar la movilidad y la masa muscular.
La pérdida de fuerza y masa muscular son unos de los síntomas más comunes del envejecimiento, al igual que la pérdida de movilidad: “De las primeras cosas que se pierden es la fuerza y la potencia de las piernas. Normalmente nuestros pacientes nos dicen que tienen dificultad para levantarse del baño, levantarse de una silla”, apunta la enfermera y quiropráctica de GERAS Envejecimiento Activo, Covadonga Gros.
El ejercicio de fuerza, el mejor aliado contra el envejecimiento
Levantarse del sofá, del váter, subir escaleras, bajar del coche o cargar algo de peso son muchas de las actividades que se empiezan a complicar a medida que pasan los años sobre nuestro cuerpo. El ejercicio de fuerza va a ser el mejor aliado para luchar contra el deterioro.
El levantamiento ligero de pesas y “movimientos básicos de grandes grupos musculares como una sentadilla, un peso muerto” es lo más recomendado por los expertos: “Es verdad que a raíz de tener un cáncer de pecho me recomendaron hacer ejercicios de fuerza, que yo los odiaba. Ahora ejercitamos al menos tres veces a la semana”, comenta Carmen, de 66 años.
La OMS recomienda realizar actividad física de forma frecuente
La normalización del sedentarismo se ha convertido en uno de los principales agravantes de la salud. La OMS expone que más del 30% de los adultos no cumplen con la actividad física recomendada, crucial para llegar sanos y con movilidad a la tercera edad: “Me he caído varias veces (...) he adquirido movilidad al hacer todos esos ejercicios”, explica Leopoldo, de 82 años.
En el caso de los adultos, la organización insiste en realizar un mínimo de 300 minutos de actividad física moderada a la semana, o bien, 150 minutos de actividad física de alta intensidad. Si seguimos las recomendaciones sanitarias nuestro cuerpo lo agradecerá y ralentizará el deterioro físico.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.