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La guerra de las cloacas: PP y PSOE se acusan mutuamente de mafiosos

La guerra de las cloacas: PP y PSOE se acusan mutuamente de mafiosos
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña GómezNoticias Cuatro
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Los socialistas, convertidos en difusores de bulos. El peor escenario para un Gobierno que había declarado la guerra a las noticias falsas. Este sábado, tres ministros, Pilar Alegría, María Jesús Montero y Óscar López, hicieron pública su indignación por la noticia que afirmaba que un excapitán de la UCO había hablado por Whatsapp de sicarios venezolanos y de poner una bomba lapa a Pedro Sánchez.

Sin embargo, esa misma mañana se había demostrado que la noticia no era tal. La conversación íntegra del ex responsable policial Juan Vicente Bonilla revelaba que realmente ironizaba con que el objetivo era él mismo y no el presidente del Gobierno.

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Bonilla, ahora contratado por Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, sí añadía otros comentarios como que habría que "desterrar a Sánchez" o llamarle "mamón". A eso se han agarrado hoy los dirigentes socialistas, sin rectificar la difusión de la noticia falsa.

Para el ministro de Transformación Digital, Óscar López, "lo que dicen esos mensajes es de cese inmediato" y "lo que están haciendo en ese inframundo cloaquero es de cárcel". El propio López ha comparado las conversaciones con la Operación Kitchen del Partido Popular, la policía patriótica que espiaba ilegalmente. Una "Kitchen 2 de pacotilla", la ha llamado. "Cuando uno actúa como la mafia y habla como la mafia, acaba como la mafia condenada por corrupción", ha dicho del PP.

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Un cierre de filas muy diferente al tono con el que se despachado, en el diario La Razón, el barón socialista más crítico con el Gobierno, Emiliano García-Page. "El PSOE está en uno de sus momentos más delicados de toda la democracia", ha señalado sobre los casos judiciales que rodean a su partido. Ante el argumento que exhiben sus compañeros de que es una persecución política, se ha desmarcado asegurando que "no hay una cacería contra todos los socialistas o progresistas. Son acusaciones concretas con nombres y apellidos".

Uno de esos nombres es el de Leire Díez, militante del PSOE, que está a la espera de comparecer esta semana ante la Comisión de Ética y Garantías del partido para dar explicaciones por su presunta mediación para obtener trapos sucios de altos responsables de la UCO a cambio de favores con la justicia y Hacienda.