Ángel Martín nos invita a escuchar ‘Detrás del ruido’: "Hasta que no tomes acción no va a suceder nada”

El humorista Ángel Martín sufrió un brote psicótico en 2017 por el que tuvo que estar ingresado. Su experiencia la contó en un libro y sirvió para hacer visibles los trastornos mentales que sufre una parte importante de la sociedad. Lo primero que hemos de preguntarnos es si nos gusta quiénes somos, para así poder hacer luego el resto del viaje.

Ángel Martín cuenta en su libro ‘Detrás del ruido’ qué es lo que hace él desde que le ocurrió el brote para que no se repita lo que le pasó. Escogió ese título porque "lo considera la manera más rápida de dar a entender lo que tenemos ahora mismo en la cabeza". Asegura que "detrás de todo ese ruido empieza a escuchar coherencia consigo mismo, es lo que empieza a aparecer cuando te alejas de todo el follón y te concentras en las cosas de forma milimétrica".

Insiste en "evitar la acumulación de emociones negativas, mediante la disciplina y el aprecio por tu vida". Cuenta que "no solemos prestar atención a la emoción más profunda de lo que de verdad necesitamos". "Hay que tener en cuenta que somos imprescindibles, el caso es que hemos de descubrir para qué lo somos".

"Un problema suele ser que nos ponemos a pensar en lo que ha ocurrido hace un rato y en lo que nos va a pasar dentro de un rato, pero no prestamos atención a lo que nos está pasando justo ahora". Su consejo al final del libro es vivir, porque considera que "no hay otra manera de comprender cómo es la vida, se trata de prueba-error, porque, aunque leas millones de libros, si no tomas la iniciativa por hacer algo nunca va a pasar".

A parte de escritor, Ángel Martín ha sido cómico, guionista, actor, músico e incluso presentador. Se le conoce sobre todo por formar parte del programa de televisión ‘Sé lo que hicisteis’ entre 2006 y 2011. En 2021 publicó ‘Por si las voces vuelven’, la precuela del libro al que se refiere esta noticia. En este cuenta cómo tuvo que ser internado en 2017 en el ala de psiquiatría del Hospital Puerta de Hierro durante quince días tras sufrir el brote psicótico.