Impresiones de 13 Sentinels: Aegis Rim; jugamos a lo nuevo de Vanillaware

Vanillaware, estudio nipón que firmó grandes obras como Odin Sphere o Dragon’s Crown está de vuelta con una nueva propuesta junto a Atlus. 13 Sentinels: Aegis Rim salió en Japón a finales de noviembre de 2019 y el próximo 22 de septiembre pasará a estar disponible de forma exclusiva en PS4, por lo que podremos disfrutarlo en Occidente totalmente traducido al español. A continuación os explicamos qué nos está pareciendo, en unas primeras impresiones que abarcan el prólogo del título, de algo más de dos horas de duración. Un tiempo suficiente como para darnos cuenta de lo prometedora que es la obra que tenemos entre manos.

El argumento de 13 Sentinels: Aegis Rim nos sitúa principalmente en el año 1985, aunque poco tardaremos en darnos cuenta de que no será el único período histórico que visitemos, ya que la trama saltará tanto al pasado (en los últimos años de la Segunda Guerra Mundial) como al futuro. Por este motivo, la enrevesada historia se irá tejiendo a lo largo de una cronología que viviremos a través de los ojos de sus trece protagonistas, quienes son estudiantes de instituto que se ven envueltos en una guerra entre peligrosos aliens invasores (que recuerdan en gran medida a La Guerra de los Mundos) y la propia humanidad.

Para hacerles frente tendrán que “subirse al mecha” (sí, también hay referencias a Evangelion) y controlar grandes robots centinelas en una gran batalla que tiene como objetivo el evitar la destrucción del mundo. Como veis, el argumento en sí puede no parecer demasiado original, ya que se apoya demasiado en las referencias a la cultura cinematográfica y cultural de los 80 en adelante. Aun así, a medida que las horas de juego pasen nos daremos cuenta de que la trama es mucho más compleja de lo que pensábamos en un inicio.

No por ello deja de arrastrar las taras de las producciones culturales niponas, como el presentar protagonistas femeninas algo sexualizadas y cortadas por un mismo patrón (inocentes y simplonas) y otros clichés que no desvelaremos para evitar destripes pero que no nos costará descubrir tras un primer vistazo si tenemos algo de experiencia en el ámbito del manga-anime.

Podríamos decir que la trama de 13 Sentinels: Aegis Rim está fragmentada en diversas partes y que la suma e interconexión de todas ellas nos acabará dando todas las respuestas que se plantean en el prólogo. De esta forma, podremos vivir la historia a los mandos gracias a trece protagonistas adolescentes con trasfondos y personalidades diferentes que se conocerán unos a otros y tendrán que colaborar en distintas circunstancias. Como decíamos, calaremos a muchos de ellos en cuanto abran la boca y suelten un par de frases, pero otros nos sorprenderán y a medida que su trama particular progrese resultarán más y más interesantes.

Encontraremos toda esta carga argumental principalmente en la parte de novela visual de la obra, la cual se intercala con un sistema de combate que detallamos más abajo. Tal y como ocurre en otros títulos del mismo género, las conversaciones serán el pilar fundamental de la progresión de la trama. No por ello se deja de lado la exploración, aunque no será demasiado compleja y al menos en la parte del prólogo no requerirá que nos movamos de un escenario a otro para poder encontrar objetos clave.

En cuanto los hallemos por la zona, podremos pensar acerca de ellos o bien hablar con un personaje sobre ese ítem en concreto (por ejemplo, una película alquilada). Esto hará que la narrativa progrese e incluso nos propondrán algunas decisiones que acabarán teniendo una gran repercusión en el destino de nuestros protagonistas.

El sistema de combate que presenta 13 Sentinels: Aegis Rim puede parecer un tanto caótico y complejo en un primer vistazo, pero no tardaremos en cogerle el tranquillo tras completar los primeros tutoriales. Si aun así no estamos convencidos con la propuesta de Vanillaware en lo jugable, siempre disponemos de la opción de activar el modo de dificultad Fácil (también el Difícil si lo que buscamos es un reto), por lo que no nos atascaremos progresando en la aventura. Además, dispondremos de unos instantes en los que la acción se congela cuando debemos escoger qué movimiento o ataque realizar, por lo que nos dará tiempo de pensar con calma nuestro siguiente paso.

En general, podríamos considerar el combate del título como estratégico, casi como si del ajedrez se tratara. Tenemos diversos centinelas en nuestro poder y cada uno de ellos dispone de una habilidades, ataques y características particulares, por lo que deberemos hacer uso de ellas de forma inteligente para poder repeler los ataques enemigos. Cada batalla tiene un objetivo distinto, pero las primeras se centrarán principalmente en acabar con los Kaijuu que tenemos como adversarios y proteger un determinado terminal, ya que si los enemigos acceden a él todo terminará.

Por este motivo, y cuando ya comprendamos las bases del combate, tendremos que alternar el uso de nuestras fuerzas entre ataque y defensa para completar el reto que nos proponga cada nivel con éxito. Podemos situar algunos centinelas alrededor del terminal y usar habilidades como “Barrera” o misiles a distancia, mientras que los demás compañeros se encargan del ataque cuerpo a cuerpo o usan láseres de corto alcance para asegurar que los contrincantes no continúan con su avance.

En líneas generales, el combate está bien equilibrado para resultar interesante y con el punto adecuado de desafío como para mantenernos alerta en todo momento sin llegar a frustrarnos ni a resultar repetitivo. Debido a alternar estas secciones de batalla con las más relajadas de novela visual, el resultado es una mezcla más que interesante que nos invitará a seguir descubriendo todos los misterios que envuelven a la trama y a sus personajes protagonistas.

El apartado gráfico de la obra es toda una delicia. No hay más que observar las capturas que acompañan a esta pieza para descubrir el mimo que Vanillaware ha aplicado en su creación, que podremos disfrutar en cada escenario y personaje dibujado a mano y con un estilo que nos enamorará. Esto se aplica también a la iluminación de cada escenario, que nos dejará boquiabiertos al aplicarse en localizaciones que derrochan belleza por cada uno de sus píxeles.

En el ámbito técnico el título aguanta muy bien el tipo. La práctica ausencia de pantallas de carga hará que no tengamos que esperar al disfrutar de nuestra partida, algo que se agradece y llega de la mano de una buena optimización en PS4. En cuanto a errores o bugs, al menos en el prólogo no nos hemos encontrado con ninguno, por lo que no tenemos queja alguna acerca de su rendimiento.

Por último, el apartado sonoro del título brilla por disponer de una BSO inmersiva y que no desentona en ninguna de las escenas que la aventura plantea. Acompañada con efectos de sonido logrados y de un gran doblaje al japonés (con subtítulos muy cuidados al español y una localización de lujo), resulta una producción más que notable en todos estos apartados.

Con 13 Sentinels: Aegis Rim, Vanillaware y Atlus demuestran una vez más que el llevar su sello es sinónimo de calidad. Tan solo con su prólogo ya quedaremos enganchados a su enrevesada e interesante historia, con ganas de conocer más de sus trece personajes protagonistas e inclinados a seguir explorando los bellos escenarios de los que dispone el juego. Todo ello, acompañado por un sistema de combate estratégico que queda muy bien equilibrado con la parte de novela visual de la obra, acaba conformando una producción muy prometedora que se podría colar en la lista de mejores juegos del año 2020.

Hemos realizado este avance gracias a una copia de PS4 proporcionada por Koch Media