Casi 50 etarras acompañados de sus familiares viven actualmente en Venezuela. Hasta allí se ha desplazado un equipo del programa para conocer cómo viven. La primera parada es Casa Pakea, un restaurante regentado por él. Allí, nos atiende su hija que, entre otras cosas, niega la implicación de su padre en el asesinato de un guardia civil.