Sudán del Sur acepta la participación de países vecinos en una fuerza regional de protección

El viceportavoz del Ejército sursudanés, Santo Domic, ha indicado en declaraciones a la emisora sudanesa Radio Tamazuj que la fuerza regional contaría con 4.000 efectivos, agregando que hay conversaciones en marcha con Etiopía para analizar su participación en la misma.

Así, ha desvelado que los contactos con las autoridades etíopes se han centrado en los aspectos relativos al despliegue y la aplicación del acuerdo de paz entre el Gobierno y los rebeldes, firmado en agosto de 2015.

"El Gobierno de Sudán del Sur no tiene problema alguno con los países vecinos, ya que son hermanos, y aceptamos cualquier fuerza que quieran aportar", ha sostenido en sus declaraciones.

La decisión ha llegado poco después de la visita a la capital de Sudán del Sur, Yuba, del primer ministro de Etiopía, Hailemariam Desalegn, quien alcanzó acuerdos sobre cooperación bilateral con el Gobierno que encabeza Salva Kiir.

La violencia ha ido en aumento en el que es el país más joven de África desde julio de 2016, cuando se retomaron los combates entre las fuerzas leales al presidente, Salva Kiir, y los combatientes leales al exvicepresidente y líder rebelde, Riek Machar.

Machar huyó de Sudán del Sur y se trasladó a Sudán --y después a Sudáfrica--, desde donde emplazó a sus fuerzas a reorganizarse para mantener una "resistencia armada" frente al Gobierno de Kiir.

La rivalidad entre Kiir, de etnia dinka, y Machar, que es nuer, se tradujo en un primer conflicto en diciembre de 2013, cuando el presidente del país decidió cesar a Machar como su número dos.

El conflicto entre los dos bandos terminó con un acuerdo de paz firmado en agosto de 2015 y que implicaba el regreso de Machar a para que volviera a ser nombrado vicepresidente del país, nombramiento que llegó en abril de 2016.

Sin embargo, las continuas violaciones del pacto y los graves combates de julio llevaron al cese de Machar, que fue relevado en el cargo por el general Taban Deng Gai.