Seis familias de diferentes nacionalidades han llegado ya al Parador de Tortosa. Este es el primer lugar al que acuden los parientes tras llegar a España. Su estado es de angustia y shock, por ello se ha puesto a su disposición un equipo de ayuda psicológica que les acompaña en todo momento. Y es que las familias deben pasar por el trámite más duro: reconocer el cuerpo de sus seres queridos.