La que manda en la cocina es Ángeles y así se lo ha hecho saber a su hija, "ella tiene que hacer lo que yo le diga", ha afirmado para después em`pezar con las instrucciones de la receta. Después ha cogido una velocidad al apretar el pulsador que casi lo rompe, "al final vamos a ganar y nos lo van a quitar para pagarlo", ha bromeado María. A madre e hija se les ha dado muy bien y les ha sobrado incluso tiempo.