Una aseguradora pagará a los vecinos 1,2 millones de euros tras el derrumbe del edificio. Al parecer, el motivo es la conciencia social y José Julio, uno de los vecinos, asegura que aunque en un principio la sensación era de euforia, no será tan fácil como parece: “Ese dinero no va a cubrir el total de las hipotecas y no van a paliar el dolor que ha habido, que hay y que habrá, las pérdidas que ha habido son irreparables”.