Venus alucina con el look con metralleta incluida de su cita en ‘First Dates’: “Wow”

Auhuru es una joven muy original que comenzó a utilizar orejeras para evitar los sonidos superaltos “me ponían muy nerviosa” y ha intentado adaptar las orejeras a todos sus outfits. Carlos Sobera se ha interesado por el origen de su nombre y ella le ha explicado que significaba “ver un millón” y que era de origen nigeriano. Ella es creadora de joyas, de música… y su ilusión es llegar a un millón dónde sea “seguidores, dinero, en lo que sea”. Es bisexual, pero se inclina más hacía las mujeres “que le guste la ropa y que pinte, cante o tenga algo artístico”.

Venus, su cita, es una persona que se relaciones mucho con el mundo de la magia y lo espiritual y su nombre le llegó por casualidad “tuve un sueño, me desperté y dije ‘Soy Venus”. Al ver a Auhuru ha exclamado un “Wow, que persona más genial” y se ha puesto muy nerviosa. Carlos Sobera le ha propuesto un juego y les ha dicho que, si las dos cogían el globo a la vez, tenían una cena juntas y si no, no. Las solteras se han puesto muy nerviosas, pero lo han cogido a la primera.

La cita ha comenzado con mucha ilusión y con muchas ganas. Auhuru ha querido saber cuántos años tenía su cita y le ha pedido que no se sorprendiera por su gesticulación con las manos, pero Venus le ha dicho que no se asustaba porque era Ballroom (Lugar done se expresa, se celebra y se exhibe la identidad a través de distintas actuaciones). Es mitad chilena mitad española y a Auhuru le ha encantado que compartieran afición “Gané un premio, fui commentator”.

Venus le ha explicado que a ella le gustaba mucho montarse y lucir perfecta, algo que comparte su cita. Las dos son neurodivergentes y eso les ha hecho sentirse mucho más cómodas juntas. A Venus le gusta leer, pero también está desarrollando otras de sus facetas artísticas y ha empezado a pintar, a diseñar ropa… Auhuru le ha dicho que ella también hacía música, pero que había muchas cosas que parecía que iba a hacer bien y que se le daban fatal. De hecho, le ha sorprendido diciéndole que realmente era farmacéutica.

Las solteras se han tomado el postre en el reservado y en el momento que ha comenzado a sonar la música, Auhuru le ha advertido a Venus que lo de bailar no era lo suyo. La soltera no le ha dado importancia y le ha demostrado que a ella no se le daba nada mal. Auhuru ha flipado al verla moverse al ritmo de la música y han terminado de hacer match.

Jugando a los juegos del amor, Venus le ha pedido permiso para darle un piquito y Auhuru le ha dicho que sí. Las dos estaban felices, habían encontrado a alguien que hablaba su mismo idioma y no han dudado en coronarse mutuamente reinas de sus bailes. Las solteras han hecho más y lo han celebrado besándose mucho más