Nueva etapa de 'Diario de… a pie de calle'

cuatro.com 31/05/2013 12:32

En España hay cerca de 20.000 cargos de confianza o, lo que es lo mismo, personal que ha sido elegido a dedo, que trabaja en la administración pública. Son los llamados asesores y que se supone que realizan tareas específicas para las que no están capacitados los funcionarios. Sin embargo, 'Diario de... a pie de calle' descubre en este reportaje que detrás de muchas de las designaciones a dedo hay amiguismo y enchufismo ejercido por auténticos caciques. En el Ayuntamiento de Alcorcón, en Madrid, el alcalde tiene dos chóferes que cobran 43.000 euros cada uno y mientras tanto unos 70 trabajadores del consistorio han sido despedidos en los últimos meses. Dicho Ayuntamiento tiene nada menos que 7 asesores en la concejalía de deportes y un total de unos 50 cargos de confianza con un coste que ronda los 2 millones de euros anuales. En el ayuntamiento alicantino de Orihuela se da la circunstancia de que en el equipo de gobierno hay más asesores puestos a dedo que concejales elegidos democráticamente. Acompañados de un miembro de la oposición, un equipo del programa recorre las dependencias del ayuntamiento para demostrar que incluso algunos de estos cargos de confianza tienen unos horarios muy flexibles o simplemente no aparecen por su lugar de trabajo. Por si fuera poco más de un cargo elegido a dedo no tiene la titulación necesaria para desarrollar ese puesto de trabajo.

En el municipio madrileño de Torrelodones encontramos el polo opuesto. El partido 'Vecinos por Torrelodeones' decidió que los cargos de confianza no eran necesarios y todos los años se ahorra 250.000 euros. Además, la alcaldesa ni tiene chófer, ni coche oficial, ni siquiera plaza de aparcamiento asegurada en el ayuntamiento. Es un ejemplo de gestión que consigue acabar cada año con superávit.

Decenas de pequeños empresarios denuncian a 'Diario de... a pie de calle' que una constructora se dedica a contratar sus servicios y después no les paga. El programa consigue reunir a un grupo numeroso de damnificados, que hartos de ser engañados por la constructora Cantera del Vértice, están dispuestos a lo que sea con tal de que les devuelvan lo que les deben. Además, el programa descubre que esta constructora está especializada en obra pública y es la beneficiaria de numerosas adjudicaciones de ministerios y ayuntamientos. A pesar de adeudar miles euros a pequeños empresarios siguen recibiendo los favores de la administración.

El paro y la falta de expectativas para encontrar trabajo están llevando a muchas personas a buscar un empleo de manera desesperada. Teresa denuncia al programa a un supuesto empresario que busca secretaria para su negocio. Atraída por un sueldo digno y unas condiciones laborales apetecibles acude a la entrevista de trabajo ilusionada, sin embargo se encuentra con un depravado que lo único que pretende es aprovecharse de su necesidad. Teresa consigue grabar como la entrevista es un auténtico acoso sexual que acaba con un intento de abuso por parte del entrevistador.