Una vez más, gracias a la denuncia de nuestros telespectadores, logramos descubrir que existen intrusos que practican la cirugía estética en cuartuchos, hoteles e incluso a domicilio. Impostores que utilizan y trafican con sustancias prohibidas, como la silicona líquida, burlando a las autoridades sanitarias y causando estragos en muchos pacientes que se fían de ellos y de sus precios. Lo barato de sus intervenciones atrae a muchos incautos que son víctimas de sus negligencias.
En este reportaje les mostraremos, con detalle, cómo actúan estos falsos cirujanos, uno de los cuales estuvo apunto de descubrir nuestras cámaras ocultas. Le llaman 'La Miguela' y ya ha sido denunciado en varias ocasiones e incluso grabado con cámara oculta. No parece importarle ya que sigue operando. Este verano dejó su peligroso rastro en Lugo, donde le destrozó los glúteos a una mujer que se puso en sus manos. El programa le siguió la pista, le localizó y una colaboradora logró cerrar una cita con él. En este primer acercamiento 'La Miguela' le confirma que sigue operando y que está dispuesta a infiltrarle la silicona líquida en los pechos, los glúteos e incluso el entrecejo. El lugar de la operación no será una clínica sino la habitación 1005 de un hotel de Madrid. Allí el programa consigue grabar el 'modus operandi' de este desaprensivo gracias a diversas cámaras instaladas en la habitación del hotel.
Pero 'La Miguela' no es un caso aislado. En este reportaje también descubrimos a una 'falsa cirujana' que opera en su apartamento, que infiltra silicona líquida conseguida ilegalmente, que utiliza jeringuillas de veterinario y, para colmo, con la colaboración de una farmacia que le vende anestésicos y antibióticos sin receta. Con estos datos Mercedes Milá entrevista a Antonio Porcuna (Presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética), el cual le confirma el delito que están cometiendo estos intrusos sin escrúpulos.1
Hace unas semanas se han clausurado varias clínicas donde se realizaban abortos ilegales. Pero, mientras se debate sobre el buen o mal ejercicio de estas clínicas ¿Sabían que en España se siguen realizando abortos clandestinos? Interrupciones del embarazo en casas particulares con grave riesgo para la mujer. Mercedes Milá entrevista a una joven víctima de un aborto clandestino, que estuvo a punto de morir en el intento. Tomó un protector estomacal, 'Cytotec', que es utilizado por algunas mujeres como método abortivo. Un equipo del programa descubre que hay un mercado negro de esta sustancia y que son bastantes las mujeres, sobretodo inmigrantes, que las compran y abortan con ellas. Localizamos al mafioso, apodado 'el Timbalero', que las comercializa y comprobamos que las vende con total impunidad en la calle. Además, indica cómo han de ser ingeridas y cuál es el procedimiento exacto para introducirlas en la vagina de la paciente. Mientras estos matasanos actúan impunemente en las calles, las clínicas abortivas oficiales han tenido que realizar paros. Sus portavoces alertan al mismo tiempo de que han observado un repunte de los casos de mujeres que abortan con 'Cytotec' por miedo a acudir a dichas clínicas.
Por último, el programa se adentra en el negocio del cáncer. Otra denuncia de un telespectador nos alerta de que el antiguo 'Bio-Bac', un medicamento que supuestamente curaba el cáncer, está siendo comercializado con otro nombre: 'Renoven'. La 'operación brujo' llevada a cabo por la Guardia Civil en 2002 desmanteló el laboratorio clandestino donde se fabricaba el 'Bio Bac' y el Ministerio de Sanidad retiró el supuesto fármaco del mercado. Ahora los fabricantes dicen que es un complemento alimenticio y se compra en los herbolarios con total normalidad. Sin embargo, según el Ministerio de Sanidad, no está registrado en España ni como complemento alimenticio ni como medicamento y quien lo comercializa está cometiendo fraude. Un equipo del programa demuestra que los mismos médicos que fueron denunciados hace cinco años siguen recetando 'Renoven' y afirman sin ningún reparo que cura el cáncer.