'Diario de... Economía sumergida'

GABINETE DE PRENSA DE TELECINCO 10/08/2010 11:24

La proliferación de talleres de calzado clandestinos en Alicante

Un equipo del programa ha viajado a una localidad alicantina para mostrar cómo la ilegalidad laboral está a la orden del día en el sector de la fabricación de calzado. Haciéndose pasar por una empresaria del sector en busca de proveedor, una reportera de “Diario de…” ha visitado pequeñas factorías del municipio, donde la contratación ilegal y las difíciles condiciones de trabajo de los operarios se encuentran a la orden del día. La precariedad de los empleados contrasta con la holgada situación de los propietarios de los talleres que se enriquecen con los pedidos de algunas de las principales firmas de calzado.

Tras la grabación de los reveladores testimonios, Mercedes Milá acudió a la Inspección de Trabajo de la Comunidad Valenciana, para denunciar ante el director territorial, Alejandro Patuel, las innumerables irregularidades detectadas. La iniciativa de la presentadora de “Diario de…” conllevó la posterior visita de los inspectores a dichos locales clandestinos, que fueron inmediatamente expedientados.

Transportes ilegales y reventa de productos robados en las grandes ciudades

Llevar clientes en taxi de manera fraudulenta y transportar mercancías sin licencia son algunas de las actividades ilegales que tienen lugar en las grandes urbes en las que también, según demuestra el reportaje de investigación, numerosas personas roban en hipermercados y grandes superficies con un único fin: revender dichos artículos a clientes con pocos recursos económicos.

Los mercados, principal escenario de la búsqueda de fruta descartada

Asimismo, “Diario de…” descubre una extraordinaria forma de subsistencia en la capital madrileña: la búsqueda de piezas desechadas en los grandes puntos de venta de fruta de Mercamadrid para posteriormente venderlas en puestos ambulantes. Finalmente, el reportaje revela cómo muchos inmigrantes consiguen algo de dinero extra levantándose de madrugada para lograr un buen puesto en la cola de algún organismo oficial y revender su privilegiada posición esa misma jornada a cualquier interesado a un precio de 40 euros.