Estos datos pueden verse en un reciente estudio realizado por Kaspersky Lab sobre hábitos de seguridad de los consumidores. Cuando se les pregunta por el tipo de información que podría ser objetivo de los cibercriminales, un 52% de los usuarios españoles está muy preocupado por sus contraseñas, un 2% más que la media europea, una cifra muy por encima del 40% de los preocupados por la seguridad financiera.
Según el mismo estudio, cerca del 12% de los usuarios españoles vio cómo sus cuentas sufrían ataques por parte de cibercriminales. Y es importante resaltar que en casi la mitad (47,5%) de las ocasiones en las que el ataque tuvo éxito sólo fue necesario adivinar la contraseña. La cifra no sorprende si se tienen en cuenta los malos hábitos a la hora de definir una contraseña y el inadecuado modo con que la guardan los usuarios.
"Es difícil crear y memorizar una contraseña fuerte para cada cuenta. Sin embargo, hay aplicaciones que nos ayudan ante estas situaciones, generando contraseñas adecuadas, diferentes para cada uno de los servicios que utilizamos, las guardan convenientemente y de forma segura, y las sincronizan en los distintos dispositivos que podamos usar, introduciéndolas automáticamente en formularios o páginas web", explica el director general de Kaspersky Lab, Alfonso Ramírez.
Una de estas soluciones es Kaspersky Password Manager, que ahora cuenta con una nueva versión 'freemium'. Además de las características estándares de este tipo de productos, la última versión puede importar contraseñas desde otras soluciones similares, generar de forma automática contraseñas fuertes en PC y Mac y comprobar que las contraseñas introducidas son seguras.
Los usuarios de la nueva versión de Kaspersky Password Manager también tienen acceso a sus contraseñas a través de su página personal en el portal My Kaspersky, ya sea porque la aplicación no se haya podido instalar o porque necesiten introducir una contraseña en el dispositivo de un tercero. Encontrar una contraseña adecuada ahora es mucho más sencilla que nunca gracias al control de voz para Google Chrome.
"El usuario sólo necesita tener en la cabeza una contraseña maestra en lugar de una para cada servicio. Estas aplicaciones aseguran nuestras cuentas y liberar nuestra memoria para que se ocupe de otros asuntos", añade Ramírez.