El evento consistía en una recaudación de fondos para apoyar a los soldados después de la guerra. El acto tuvo lugar en Carolina del Norte.
Los marines retaron a diferentes personas del público a algunos ejercicios físicos. Un cadete pensó que podría derrotar a una niña haciendo flexiones, pero se equivocaba. La niña se llama Kaylyn Mintz y es una joven gimnasta que se está preparando para los campeonatos que se dan en Estados Unidos.
Todo el mundo animaba a Kaylyn con gritos y aplausos. El cadete al principio se queda alucinado con lo que está viendo pero, al final, el cadete no pudo más y la joven consiguió la victoria.