Las cuatro personas están detenidas por su presunta participación en un delito contra las relaciones familiares, al querer alterar la paternidad del menor.
El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, ha informado en rueda de prensa de que la investigación se inició a mediados de mayo de este año después de que el matrimonio llevara a una revisión médica al bebé. Los médicos detectaron que podría tener una enfermedad congénita y reclamaron la presencia de la madre biológica, que nunca llegó a presentarse mientras el matrimonio alegaba diferentes excusas.
Los servicios sociales alertaron al Servicio de Protección de Menores, que solicitó la colaboración de la Policía Nacional. Los investigadores determinaron que la madre del menor era una mujer de nacionalidad rusa de unos 30 años, que vivía en Rusia y que había viajado a España aproximadamente un mes antes del alumbramiento. La mujer dio a luz en una clínica privada de la provincia de Málaga y abandonó el país un día después de inscribir al bebé en el Registro Civil como hijo suyo y del presunto padre septuagenario.
La policía dudó de la paternidad del hombre tras comprobar que no tenía pasaporte y jamás había viajado a Rusia.
El matrimonio, que tiene diversas propiedades en la provincia de Málaga, fue arrestado en una cochera adaptada como vivienda de la comarca de la Axarquía, de unos 25 metros cuadrados, sin que las condiciones de salubridad fueran las más adecuadas.
El presunto padre reconoció que el bebé no era hijo suyo y que él y su esposa, a fin de tener un heredero, habían decidido pagar para reconocer al hijo de la mujer rusa a la que habría entregado diversas cantidades de dinero en varios pagos.
Él mismo explicó que en la operación de adquisición del niño habían participado otras dos personas, un abogado y una mujer también de nacionalidad rusa y residente en la provincia, quien hizo las funciones de intérprete. Estas dos personas habían organizado y estado presentes en la recogida de la madre a su llegada a España, el nacimiento y registro del recién nacido.
El matrimonio pagó más de 100.000 euros para poder traer a la mujer embarazada de ocho meses hasta Málaga, que diese a luz e inscribir al recién nacido en el Registro Civil.
Este caso ha sido remitido al juzgado de instrucción de guardia y el niño ha quedado bajo la protección del Servicio de Menores de la Junta de Andalucía en Málaga, que ha iniciado los trámites para el desamparo del mismo, a fin de asumir su tutela.