Un hombre en Las Vegas ha sido acusado asesinato después de usar un martillo por tratar de matar a un indigente. Lo que él no sabía es que en realidad era un maniquí disfrazado de mendigo que la Policía colocó como señuelo, informa International Business Times.
Una cámara de seguridad de la zona mostró como el "falso indigente" fue golpeado en la cabeza con un martillo repetidas veces, lo que fue suficiente para que la Policía llevara a cabo un arresto.
Los investigadores decidieron colocar este señuelo porque, semanas antes, habían sido golpeados hasta morir otros dos mendigos y además en la misma zona.
La acusación contra Shane Allen Shindler, de 30 años, por intentar asesinar a un señuelo humano se presentó el pasado martes. El juez de paz ordenó que debía someterse a una evaluación de competencia mental.
Dos hombres sin hogar murieron por fuertes lesiones en la cabeza en los primeros dos meses del año, y las autoridades creen que los asesinatos pueden estar vinculados. El cuerpo de Daniel M. Aldape, de 46 años, fue encontrado el 4 de enero, mientras que el cuerpo de David H. Dunn, de 60 años, fue encontrado el 3 de febrero.
La policía sospecha que Schindler estuvo involucrado en los asesinatos, aunque no ha sido acusado en relación con ninguno de los dos casos. Schindler admitió haber pateado el maniquí y golpearlo con un martillo, pero dijo que sabía que era un maniquí y no una persona cuando lo hizo, según informaciones de Las Vegas Review Journal.
Sin embargo, en el tribunal, el fiscal adjunto de distrito Marc DiGiacomo argumentó en una audiencia que no había manera de que Schindler pudiera haber sabido que el maniquí no era humano y afirmó que Schindler era "un grave peligro para la comunidad".
El abogado de Schindler no hizo ningún comentario pero, como informa el mismo diario, confirmó que su cliente se declarará inocente.
La policía ha explicado que el vídeo de vigilancia muestra que Schindler golpea al maniquí en la cabeza. El Capitán de la Patrulla del Distrito Centro, Andrew Walsh, explicó que no querían que estos casos quedaran sin resolver solo porque fueran personas sin hogar, por lo que colocaron el señuelo humano para comprobar si el asesino mordía el anzuelo, y funcionó.