"El papá te ha insultado y le he matado", confesó el parricida a su madre varias horas después de cometer el crimen en el domicilio familiar en la calle Ingeniero José Sirera de la capital valenciana.
El cadáver, según recoge el diario 'Las Provincias', fue descubierto sobre las nueve de la noche, horas después de que el parricida confesara a su madre el horrendo crimen que acababa de cometer. El hijo se lo contó a su progenitora en la calle y cuando la mujer subió a su casa descubrió el cadáver.
Cuando la Policía llegó a la casa encontraron un machete de grandes dimensiones en la mesa del comedor. El arma estaba manchada de sangre. La víctima yacía en el suelo.