El capitán del grupo especial de GEAS Carlos Martínez ha informado en una rueda de prensa celebrada a última hora de este martes que "se ha revisado el barco a fondo. Consideramos que se encuentra limpio, que dentro no queda nadie".
Además, el coordinador de Operaciones de Salvamento Marítimo, Joaquín Madeiras, ha calculado que han pasado los días suficientes para que los cuerpos, de haber quedado sumergidos, "adquieran cierta flotabilidad" y empiecen a emerger a la superficie.
En la última jornada, los buzos han inspeccionado dos camarotes, la sala de víveres y la sala de máquinas sin localizar ningún cuerpo. "Han entrado 12 buceadores en la sala de máquina y alguno ha salido con ronchas por el gasoil", ha dicho Martínez.
A partir de ahora las labores de búsqueda seguirán los rastros de las corrientes de estos días, que van en dirección al Cabo Peñas. "Hoy cuatro buceadores se han dejado llevar por la corriente, han seguido los restos que se han desescombrado estos días y han llegado a batir una zona de un kilómetro y medio y no han encontrado nada", ha indicado el capitán de la Guardia Civil.
"La mar desde mañana se pone en unas condiciones que hace casi imposible entrar en el pecio por motivos de seguridad", ha explicado Martínez, antes de informar que los 28 buceadores que había hasta ahora participarán en las batidas que desde el primer día ha venido realizando Salvamento Marítimo.
El rescate se centra en la búsqueda de los cuerpos del gallego Manuel María Tajes y el portugués José Farinhas, los dos miembros de la tripulación que no han aparecido. Ha habido un único superviviente en este suceso y ya se cuentan seis fallecidos